Ya me he hecho fan de un sujeto de mi nuevo cole. Se llama S4años. Es menudo, moreno y tiene el pelo cortillo y tieso. Come poco. Sabe mucho.
Cuando preguntamos como hacer tal o cual cosa o presentamos algún objeto nuevo, C4años, lo repite en voz baja, alta, sentado en la asamblea, de pie, lejos de mi y como me ha conquistado, acercándose a mi, naricilla con nariz y diciéndomelo bajito.
El otro día me fui con un montón de tarjetas de vocabulario al patio y lo llamé. Llegó a decirme ochenta y tres palabras en inglés. Flipé. Cumple los cuatro años el próximo siete de octubre.
En la segunda sesión que tuve con su clase me llamó a gritos mientras miraba dentro de una cajonera llena de cuentos....
- Teacher, ¡un cancrejo! (nuestro cole está a escasos cien metros de la playa y una piensa que un cancrejo puede llegar a una cajonera en la segunda planta de un edificio)
- Let me see... ¡aaaaaaaaaaaaaaaaaaah! (el sujeto me mira con los ojos como platos y el resto de sujetos dejan sus actividades a un lado y se acercan correteando o a saltitos)
¡¡¡C. que eso no es un cancrejo, es una cucharachaaaaaaaaaaa!!!
Le conté a la madre lo sucedido intrigada por el desconocimiento de C4años sobre el ser vivo más asqueroso e invasor de Águilas, las cucarachas o gambas (por el tamaño y color). Me contó que si le dicen que es un cangrejo, el niño se convence de que no es una cucharacha y se queda tan pancho. La madre que la parió.
Cuando preguntamos como hacer tal o cual cosa o presentamos algún objeto nuevo, C4años, lo repite en voz baja, alta, sentado en la asamblea, de pie, lejos de mi y como me ha conquistado, acercándose a mi, naricilla con nariz y diciéndomelo bajito.
El otro día me fui con un montón de tarjetas de vocabulario al patio y lo llamé. Llegó a decirme ochenta y tres palabras en inglés. Flipé. Cumple los cuatro años el próximo siete de octubre.
En la segunda sesión que tuve con su clase me llamó a gritos mientras miraba dentro de una cajonera llena de cuentos....
- Teacher, ¡un cancrejo! (nuestro cole está a escasos cien metros de la playa y una piensa que un cancrejo puede llegar a una cajonera en la segunda planta de un edificio)
- Let me see... ¡aaaaaaaaaaaaaaaaaaah! (el sujeto me mira con los ojos como platos y el resto de sujetos dejan sus actividades a un lado y se acercan correteando o a saltitos)
¡¡¡C. que eso no es un cancrejo, es una cucharachaaaaaaaaaaa!!!
Le conté a la madre lo sucedido intrigada por el desconocimiento de C4años sobre el ser vivo más asqueroso e invasor de Águilas, las cucarachas o gambas (por el tamaño y color). Me contó que si le dicen que es un cangrejo, el niño se convence de que no es una cucharacha y se queda tan pancho. La madre que la parió.