septiembre 11, 2011

En Madrid se lleva una tutoría sin hora con las alumnas y sin hora sin alumnas. A veinte horas lectivas, sin aumento de la jornada total de 37,5 (porque es ilegal), esto es, reducción de las horas complementarias que se emplean para preparación de clases (de las guardias no). Cobran menos que aquí en Murcia. Se han reducido como aquí un montón de programas pero la calidad no merma porque el grupo privado "salvación de la enseñanza" (o algo similar, formado entre otros por la hija de Botín) da refuerzos por las tardes y educa en lo que ella, Lucía Figar y otros muchos consideran EDUCAR (adoctrinar en la religión católica). La ratio ha aumentado hasta unos 33 alumnos en la ESO y unos 35 en bachillerato. De aquella consideración para con la ratio en los grupos con ACNEE han dicho a los centros que ni hablar.

Efectivamente se puede ser tutora sin estas dos horas sin que las consecuencias sean para alarmarse, también podemos trabajar dos horas lectivas más y las consecuencias no serán tampoco alarmantes en lo que a calidad de la enseñanza se refiere (sólo estaremos un poco más cansadas), el aumento de trabajo complementario que esas dos horas lectivas más generan y la reducción del tiempo reconocido para esas labores tampoco es alarmante ni tiene por qué disminuir la calidad de la enseñanza. Cobrar menos, tampoco influye en eso. Tener más alumnas en clase, pues tampoco, porque donde comen cinco comen seis. Que antes fuesen dos los que no podían seguir el ritmo de clase y a los que no podías atender en condiciones y ahora sean cuatro, pues bueno, más de lo mismo.

Que no se invierta en formación profesional y estas alumnas estén en nuestras aulas ¿influye? Que se ofrezcan cada vez más módulos en centros privados que no ofrece la pública o carreras universitarias en la privada que no están en la pública, o carreras que sí lo están pero a las que el acceso en la privada es previo pago mientras que a la pública es previa nota, ¿influye en la calidad de la enseñanza?. Si un instituto, colegio o universidad pública exige mucho para dar un título y la privada menos ¿Influye esto en que baje la calidad de la enseñanza en la pública? Que lo que no se invierte en la pública se invierta en la privada (como bien explica Lucía Figar la segunda va creciendo y la primera deteriorándose) ¿disminuye la calidad de la enseñanza de la primera? (Hay quien dice que la calidad de la enseñanza pública no depende de la inversión, y por eso invierten en la privada, sino que depende de la formación del profesorado, mal seleccionado y muchos de ellos interinos, en la privada los profesores ni son interinos ni funcionarios, son personas y están muy bien seleccionadas).

Estos recortes se hacen para echarnos a los leones, y para que nosotras mismas expliquemos por doquier el estado de deterioro en el que se encuentra la enseñanza pública (favoreciendo la privada) pero en un clima de confusión y de resentimiento extendido por nuestras condiciones laborales.

Voy a salir a la calle, me voy a manifestar, haré huelga porque mejore la calidad de la enseñanza, porque se invierta en la enseñanza pública y mejoren las condiciones dentro del aula y no creo que la misma mierda de siempre, sistema educativo de derechas o sistema educativo de izquierdas, sean determinantes para mejorar la calidad en estas condiciones. PSOE y PP han estado contribuyendo en este proceso.

Lo que algunos añoran del antiguo BUP quizá no sea el sistema, sino las condiciones en las que se trabajaba: las alternativas (FP, trabajar en el negocio familiar, buscarse la vida), la consiguiente maduración cuando se toman este tipo de decisiones, la consiguiente motivación de la que decide quedarse... y bueno, los continuos atentados al sentido común (¿por qué no se puede repetir?), los valores, el esfuerzo... nos dejan un alumnado desorientado que espera de nosotras mucho más de lo que damos. Porque muchos de nosotras, como tantos otras, contaminadas hasta la médula también, damos lecciones de miedo, lecciones de obediencia ciega, lecciones de irreflexión, lecciones de falta de compromiso, damos lecciones miserables, desde nuestra propia miseria humana.

Voy a salir a la calle, me voy a manifestar, haré huelga... porque cambie algo, para cambiar yo, para aprender y enseñar a mis alumnas cómo luchar, cómo moverse, cómo despertar.

2 comentarios:

dintel dijo...

Y qué tranquilidad hay, verdad?

Calvin dijo...

Sí, fíjate y yo en mi cabeza he quemado todas las oficinas bancarias y me he atrincherado en los colegios con los padres, entre otras cosas.