enero 19, 2010

1º de E.S.O.

Me llega este e-mail. Insiste en él en que la transcripción no es exagerada. Yo, como tutora de 5º de P. que fui un día, y actual maestra de Inglés, doy fé.

Yo: Bueno chicos, hoy vamos a estudiar el vocabulario de las comidas en inglés: copiad estas 5 categorías (las escribo en la pizarra) y escribís en cada columna todas las palabras que os sepáis.
Amanda: ¿En inglés?
Yo: Sí, mejor que en Ruso, en inglés.
Luis. Profe, ¿cuántas categorías?
Yo: 5. Las que hay en la pizarra.
Luis: A mi no me caben.
Yo: Pues prueba a poner la hoja apaisada
Luis: ¿qué significa apaisada?
Yo: Horizontal, o sea: así (lo demuestro)
Juan: ¿qué título ponemos?
Yo: Prueba con “Food”, que es el que he escrito en la pizarra.
Fran: ¿puedo hacerlo a lápiz?
Yo: No, no puedes. Ya sabes que en el cuaderno sólo se escribe con bolígrafo.
Jessika:¿Cómo se dice pepino?
Yo: He dicho que escribáis el vocabulario que sepáis vosotros. No el que sepa yo.
Noel: ¿El huevo es una verdura?
Yo: No, no es una verdura
Federico: ¿qué título ponemos?
Yo: Lo he dicho ya dos veces.
Amanda: ¿Se puede poner “rechicken”?
Yo. No, porque repollo no se dice así en inglés (risas generalizadas)
Nieves : ¿Cómo se dice calamar?
Yo: He dicho que escribáis el vocabulario que sepáis vosotros.. No el que sepa yo.
Jesús : ¿Hay que escribirlo en el cuaderno?
Yo: Pues a no ser que quieras escribirlo en la mesa...
Ricardo: Profe, ¿Pero, qué hay que hacer?
Yo: ¿Pero tú te has lavado las orejas esta mañana?
Nieves : ¿Puedo poner zumo en la categoría de postres?
Yo: Mejor ponlo en la de líquidos.
Fran: ¿Puedo poner pollo en la categoría de postres?
Yo: En este continente, no.
......................................
10 minutos después
Yo: bueno, ahora vamos a empezar. Levantáis la mano y vais diciendo palabras; yo las escribo en el encerado. Empezamos con las verduras.
(Levantan la mano 10 alumnos y todos gritan a la vez distintas verduras)
Brócoli!
Carrots!
Salad!
Pepination!
Eggs!
Yo: he dicho que los huevos no son una verdura. Y por favor, levantad la mano y esperad a que yo os nombre para decir la palabra porque no tengo 10 orejas para entenderos a todos al mismo tiempo. ¡Arturo, no le pases notitas a María que se las leo al resto de la clase!
Arturo: ¿con cual empezamos?
Yo: con las verduras. Empieza tú, Marisol.
Marisol. Es que se me ha olvidado el cuaderno en casa.
Yo: ¿Y qué llevas haciendo estos 15 minutos, criatura? A ver, hazlo tú, Pepe.
Pepe: ¿quién, yo?
Yo: Eres el único Pepe que hay en la clase, así que vas a ser tú.
Pepe: Orange
Yo: La naranja me la pones en frutas, por favor.
Juan: Profe, el otro día oí un chiste verde, ¿puedo contarlo?
Yo: Pues aunque haya verduras de por medio, no, no puedes contarlo.
María: ¿Esto cae en el examen?
Yo: Bueno, puede que tengáis suerte y para entonces esté recuperándome de esta clase en un sanatorio mental, y entonces no habrá examen.
Todos: BIEEEEEN!


A mi que me perdonen, pero esto es falta de concentración. Con más clases de música esto se solucionaría, doy fé.

14 comentarios:

María dijo...

Doy fe, que es así. Hoy, por el mismo motivo he dicho que iba a grabarlos con una webcam y se lo iba a poner a sus padres...

Dame una explicación a que se solucionaría con más clases de música... que voy a hacer unas reclamaciones al ministerio...

dintel dijo...

Pues yo no doy tanta fe. ¿Falta de concentración? No sé exactamente qué es, pero sólo hace falta verlos en el súper con sus padres.

Antonia dijo...

ufff, que paciencia tenéis.
Se me han saltado las lágrimas de la risa, claro está que no lo sufro.

Calvin dijo...

Dintel:
¿Qué pasa en el super con sus padres?

Lo que sucede en el diálogo que posteo, es que no piensan antes de hablar, no? A los estudiantes que se dedican a tocar algún instrumento eso lo tienen bastante controlado. Difícilmente puedes hacer sonar un instrumento y tener una progresión positiva si cada vez que coges aire o le das a la cuerda, o lo que sea, no piensas y pones todos tus sentidos en la respuesta sonora.

María: yo convoqué en su momento una reunión y les puse una grabación sonora. Las caras de los progenitores eran un poema.

Güertana: nada mujer, nosotros también nos reimos cuando salimos de clase.

Ico dijo...

Gracias por hacerme reir de mí misma porque me has recordado a mi, utilizo el humor como contrarréplica a los disparates que nos dicen ante cualquier actividad por simple que sea.. tanta tele es lo que da.. la lectura enseña la concentración también..

Antonia dijo...

Después de releer el post me he dado cuenta de algo, es que soy así de lenta, se quedan así, quiero decir que se hacen mayores y la actitud no cambia. En mi último trabajo de los trece que tenía en oficina siete tenían la mente dispersa por el espacio, vamos que vivían en la luna de valencia. Se trata de la misma falta de concentración de la que hablas. Hay quien dice que hay gente que no da para más pero yo pienso que nadie es tan tonto, que se lo hacen y consiguen que les vaya bien en la vida, te podría contar mil batallitas.

Antonia dijo...

No me puedo resistir, ahí va una.
Le explico a una trabajadora un cambio en el programa de gestión, ¿lo has entendido?, que si, que si. Como no me fío al final del día compruebo que si lo ha hecho, púes no, no lo ha hecho, al día siguiente la misma pasada, así hasta ocho veces todas con la misma contestación, es que se me olvida. Las primeras veces pienso que no se ha explicado bien y enfoco la explicación desde otro punto, como no funciona amplío el rango de la explicación porque hay gente que necesita tener una visión más global de las cosas para entenderlas (yo por ejemplo) y a la octava vez le pregunto directamente si lo va a hacer y me contesta que se le va a olvidar, vaya, ya sabe que se le va a olvidar, claro está que lo que me pide el cuerpo el calzarle dos hostias que mi tiempo vale mucha pasta, pero respiro y le digo, tú misma, me voy a mi despacho y mando un mail a su jefe con copia a los encargados de los departamentos de comercial, financiero y a gerencia explicándoles que la modificación que había pedido ha costado tanto pero no se puede poner en marcha porque no consigo que la persona encargada de hacer clic se acuerde y que por favor me ayude a solucionarlo porque me he quedado sin ideas. Al día siguiente estaba hecho.

Anónimo dijo...

Y la cosa no va a mejor...
¿La causa puede ser que no tienen que esforzarse para conseguir lo que quieren? (que no suele ser nada productivo)...

Calvin dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Calvin dijo...

Güertana:la primera cosa que aprendí tras el primer examen que corregí fue: nunca preguntes "¿lo habéis entendido?" Siempre responden que sí hasta que no tienen mucha confianza. Aunque claro, tu caso era bien distinto.


Ico: la lectura es "estupenda y maravillosa" como diría una amiga, pero hay muchos prejuicios por parte de los sujetos. De un instrumento musical no suelen tener referencias negativas, además les ayuda a canalizar su estado de ánimo,se expresan a través de un canal distinto de los habituales, por ejemplo, y pueden compartirla en ese mismo momento con suscompañeros de grupo.

Calvin dijo...

Alson: Yo creo que los chavales ahora saben otras cosas.
Por otro lado,no hay una sola causa del estado en el que se encuentra la Educación en España.Además si no quieres que Mármara vaya a tirarte de una oreja, no uses el término "esfuerzo" ;)

Anónimo dijo...

Claro que las causas son más complejas o...más simples pero inevitables.
AH síiii???. MArmara: esfuerzo,esfuerzo... ¿vendrás?

Mármara dijo...

Digo yo una cosa, mai diar canion (of Colorado), y respetables colegas de la profesión docente: quien no haya pasado por una situación como la que se relata, no sabe lo que es un aula. Otrosí digo: la única responsabilidad de semejante circo recae en nosotras, esforzadas maestras, o profesoras, que volvemos tarumba a nuestro pobre alumnado con nuestras manías (yo, la primera). Así que, en el pecado llevamos la penitencia. Y muy a gusto, la llevamos.
Alson, ir, iré, a condición de que no me mentes el esfuerzo, so pena de quete caiga un ponencia al completo sobre el tema. Advertida quedas.

K. dijo...

Pues a mí me gustaría leer la opinión de Mármara. Porque sospecho que puedo estar de acuerdo con ella.

Yo no hay día que no me alegre de no seguir en el colegio, la verdad. Y yo era buena alumna (eso parecía, vaya) y todo eso, pero qué rollaco.