octubre 09, 2010

Just me.

Han pasado cincuenta horas desde que volví a prometerme, por cuarta vez, a mi misma (y a mi preparador) que iba a trabajar más. Ellas escriben y escriben. Folios con márgenes, letra equilibrada y limpia. Buen contenido. Aquí estoy, repaso lo sucedido ayer, me miro el ombligo hoy, miro por la ventana. Escucho algunas piezas del último de Maxim Rysanov. Todo Bach. Sus suites. Bach siempre será Bach, pero hoy no tengo yo el iso para barrocos. Benenzon, ¿era Benenzon? decía que cada paciente tiene un iso diferente, hay que dar con él. El mio es cambiante, el vuestro también. Tendréis días que una balada lacrimógena berreada en vuetro coche os libere. Otros días escuchar música os horrorizará. Otros, castigaréis a vuestros vecinos con reggaeton. Hoy estoy primitiva de más, mi iso conecta con Daddy Yankee. Spotify me mata ¿cómo me mete entre Bach y Daddy Yankee un anuncio de la mierda de universidad católica murciana? Mi hermano se va, ¿salgo de la cueva para llenar la casa de olor a palomitas? Con lo fácil y útil que sería redactar los dichosos objetivos de ciclo y de curso... lo haces y se termina el come come que tienes en la cabeza. Una canción más. Esta mañana me reía con Prófuga. Ya no recuerdo por qué, pero me encanta cuando nos da por decir cosas absurdas. Cuando le hablo con eses y ella me responde con acento ruso. Me pone los pelos de punta pero me río. La chincho con unas cuantas eses más. Y el caso es que no estoy triste ni agobiada. Raro en mi. Los sujetos me llevan loca. La semana que viene en la clase de segundo van a desaparecer las mesas y las sillas. Pintan en las primeras y no les dan uso a las segundas. Le pediré colchonetas a la de EF o a la de física, como la llaman los sujetos. Nada de libros, nada de lápices. Davy Dog, Naughty Monkey, Emma y el resto de la tropa van a desaparecer por ahora. Voy a comprar un micrófono con petaca. LLego sin voz a las clases de canto. El jueves me caí de la bici, estaré dos semanas sin ir a full. Ya me hacía quince flexiones a la par que mi partenaire. Él seguía treinta y cinco más. Mmm...mi iso a vuelto a cambiar, ahora, Cesaria Evora. Me viene a la cabeza mi tío John. Me llamaba desde el otro lado del Atlántico. Nunca se acordaba de la diferencia horaria. Siempre me decía study, study, study! work, work, work! Murió en octubre de 2001.


3 comentarios:

dintel dijo...

Me voy de puntillas, que es como he entrado.

Ico dijo...

Mi iso hoy es de música clásica pero aquí en el departamento a las tres de la tarde esperando por una reunión no hay radio que sintonize nada... encima ha llovido toda la noche me he abrigado más de la cuenta y estoy asada de calor...( puedes leerlo con "s" canarias..) besos

Mármara dijo...

¿Qué te puedo decir que no te haya dicho ya? Que te conectes al iso que te pida el cuerpo y que lo que tenga que ser, que sea.
¡Ah, sí! Que te proyectes al futuro que te espera si sacas las malditas oposiciones: la seguridad, y la posibilidad de hacer lo que te venga en gana. Argumento de peso, ¿no?